domingo, 21 de marzo de 2010
psico-literatura
Angelillo, El arropiero y los chicos del barrio.
Un BMW y un Audi ambos con los cristales tintados avanzaban por un camino de tierra que se adentraba por un páramo de antiguos lugares de cultivo de secano.
Los algarrobos, las oliveras, los almendros dormían en su sueño de extinción.
Llegaron los vehículos hasta donde finalizaba el rudimentario camino. En un ribazo se cortaba para dejar paso a los cultivos y el monte que se fundían en uno perdiéndose en el horizonte. Frente a los coches nacía una suave colina que ascendía hasta unirse con montañas mayores. En la otra parte del valle estaba la ermita dedicada al patrono San Antonio, cuyo nombre recogía el lugar.
Bajaron de los vehículos 8 chicos jóvenes entre risas y a empujones entre ellos. A sus pies se extendía la calzada musulmana, el único camino que se adentraba en lo profundo de la sierra.
-Tía, que sitio más cutre-dijo Eva- una joven de 18 años, morena, alta y delgada ,de rostro angelical y mirada viva. Observaba el lugar con desagrado recogiéndose el pelo en una larga coleta que le llegaba hasta la cintura.
Ya lo se tía. Yo preferiría estar de compras, pero los tíos se han empeñado en que viniéramos- respondió Lola, una muchacha de la misma edad, y con un aspecto igualmente deseable, aunque de constitución diferente.
Lola parecía más desarrollada, sus gruesos labios de color rojo y sus abultados pechos le deban más edad de la que tenía, y un aspecto menos inocente.
Bueno, no me has dicho nada de como estoy Rafa- le dijo a este Sonia, la más joven del grupo ya que tenía un año menos. Era una chica alta para su edad, con un desarrollo muy marcado, vestía muy ajustado y con muchos adornos: collares imitando las perlas, gafas de sol enormes, pendientes muy chillones y un maquillaje cargado. Todo eso era innecesario para resaltar su belleza, pues sus facciones eran muy armoniosas sin todas estas cosas.
Rafa, un joven de 22 años, quitándose sus gafas de sol de pera la agarro por la cintura, uniendo su cuerpo con el de ella. Ella le paso la mano por su cabeza rapada y su rosto rasurado.
-Estas muy buena hoy- le contesto Rafa- levantate el jersey un poco que vea el nuevo tatuaje que te has hecho en el ombligo.
Dócilmente, Sonia moviendo las rodillas juntas a un lado y otro, agachándose mientras con los brazos cruzados se subía el jersey exhibiendo su tatuaje a la altura del ombligo. Todos le aplaudieron, jalearon y silbaron. Consistía el tatuaje en el símbolo- mascota de la revista playboy , el famoso conejo.
Excitado Rafa volvió a abrazarla besándola, mientras los demás reían nerviosos.
Lola dio la gran noticia al grupo que estaban a su lado mirando con los ojos recelosos la escena.
-Voy a operarme las tetas ¿que os parece? ¿Te gustaría que las tuviera más grandes Luis?
-Me parece fantástico, aunque como están me gustan, trae que las toque- contesto Luis, un muchacho de 23 años, vestido a lo militar y de aspecto violento. Carecía de pelo como la mayoría del grupo, ya que se lo rapaban. Luis siempre estaba en tensión, no podía estar dos segundo sin estarse quieto. También tenía diversos tic en los ojos y los labios que le daban mayor aspecto de violencia.
-Toca lo que quieras -le respondió Lola.
Sonó un teléfono de un móvil. Todo el mundo empezó a desenfundarlos sacándolos de los bolsillos, bolsos, mochilas, riñoneras...
Llamaban a Sonia, era su madre:
-Cariño ¿vendrás a cenar?
-Ya veremos joder-le respondió malhumorada Sonia- no me molestes a estas horas. Son las cuatro y ya estas pensando en la cena, no se si iré. Estoy con un tio que me mola.
Se hizo un breve silencio en la conversación y suavizando el tono Sonia le pregunto: ¿Que vas hacer de cenar?
-Pues había pensado hacerte col con besamel- ¿Te apetece hija?
-No, no me apetece- le contesto alterándose- sabes que no me gusta la col porque huele mal y provoca gases, y aun así la haces. Llama a los de telepizza y compra tres pizzas que iré a casa con un chico.
-¿Pero es que tengo las coles que me dieron que se van a estropear?-le decía su madre con un hilo de voz melancólica.
-Me da lo mismo, lo entiendes, las tiras a la basura o se las das a los pobres ¿que compres tres pizzas te digo?- Le contesto llena de rabia Sonia sujetando con una mano el móvil y con la que quedaba libre hacía gestos obscenos.
Los demás que lo escuchaban reían.
-Bueno, como quieras cariño¿Donde estas?- pregunto la madre sin atreverse a alzar la voz-Estoy un poco preocupada. Hoy es el aniversario en el que murió tu padre y me siento sola¿Puedes venir hija mía a hacerme compañía?
-No te importa donde estoy, si te sientes sola vete al bar. Iré a cenar. ¿No estas contenta con eso?-le contesto con ironía Sonia orgullosa de su contestación que consideraba muy ingeniosa ya que sus amigas estaban dando palmas y haciendo muecas de aprobación.
-Lola se acerco a ella- joder tía, tu madre es un policía. Siempre controlando, que mal rollo.
-Ya lo se tía- le respondió Sonia mirándose en el espejo del coche y atusándose el pelo sintiéndose la protagonista del grupo.
-Es un coñazo mi madre. Desde que murió mi padre esta depresiva y como no tiene amigos la paga conmigo. Yo trato de ayudarle y le digo: ¿quien te va a querer si siempre estas llorando y no te arreglas?
Si tuviera pasta me iría de casa, pero como no tengo me debo de fastidiar y soportarla.
Ademas mi madre es una hortera. No se compra ropa, ni se arregla. Me da vergüenza que me vean con ella por la calle, parece una foca. De los antidepresivos que toma a engordado muchísimo. Siempre esta pensando en la comida. Quiere que sea como ella sabiendo que no quiero comer, que vomito la comida, y ella insistiendo en que coma. Cuando no lo hago se pone a llorar la mema. ! Si supierais el asco que me da! Ojala se muera.
-La verdad es que si que es un coñazo vivir con los padres-respondió Eva mirándose en la pantalla del móvil- yo por eso me he ido a vivir con mi abuela.! Ya estaba harta de ellos!.
Menudo cambio. Mi abuela tiene 80 años y no se entera de nada. Se pasa todo el día durmiendo y hago lo que me da la gana. Mis padre encantados. Como nunca van a visitarla no tengo que rendir cuentas. A parte, la momia tiene buena pensión y le saco lo mío.
-Bueno guapa-le respondió Sonia pasándose por tercera vez sobre sus gruesos y jugosos labios el pintalabios- tendrás que limpiar la casa y a la momia. Llevarla al medico y no que asquerosidades más de esas que se hace con los viejos.
- De eso nada guapa- respondió Eva categóricamente y con mirada severa subiéndose el pantalón que llevaba tan ajustado que cuando se inclinaba o andaba se podía ver su ropa interior - viene una mujer inmigrante, de esas que te da la seguridad social, y hace de criada, nos trae hasta la compra. También le cambia los pañales, le hace la cama. No se mete en nada de lo mio. El otro día me pillo con un tio mazas en la cama y no dijo nada. Menuda cara de envidia tenia la tia estreñida-diciendo esto se puso reír cínicamente, al igual que las demás chicas.
-Bueno tias- corto la conversación Lola- ¿ Os dais cuenta que hace más de tres días que no hemos estado en el corte Ingles, ni en Mac Donals? Podíamos ir esta tarde y cenar allí.
-Tia, y las pizzas de mi madre-dijo Sonia.
-Llama y dile que hay cambios de planes. Si ya las ha encargado que se las coma ella-comento Eva mirándose el atrevido escote que dejaba ver sus gruesas tetas. Se las subió un poco sobándoselas ligeramente y haciendo una mueca de aprobación para ella misma.
-Vale- dijo sacando el móvil Sonia.
Esta llamo a su madre que rápidamente cogió el teléfono. Cuando le contó el cambio de planes su madre empezó a llorar y Sonia colgó sonriendo.
Vamos, vamos que esto es un muermo,venga la música- gritaba la voz histérica de Lucas, un muchacho blanquecido por falta de sol y propenso a los estado de euforia y descontrol.
Se introdujo en el BMW y conecto el aparto de música del coche.
Luis preparaba bebidas alcohólicas mezclando su contenido en una palancana. Una vez hecho esto empezaron a beber, hasta que Andrés se metió en el coche y paro la música.
-Que haces imbécil- se escucho al unisono la voz del grupo.
- ¿Es que no vamos a empezar a hacer a lo que hemos venido?- les dijo.
-¿Podéis volver a decir lo que hemos venido a hacer a este asquerosos lugar?- Pregunto Eva.
-Te lo he dicho cuatro veces-le dijo Luis extendiendo cuatro dedos de su mano que llevo frete a la boca de Eva mientras suspiraba y giraba la cabeza a un lado y otro en señal de desesperación y nerviosismo. De la frente le salia una gruesa vena a Luis, señal de excitación nerviosa, cosa muy frecuente en su vida. Con cara de pocos amigos y haciendo muecas de ascos se lo volvió a explicar:
-Mañana en nuestra tienda favorita, decathlon, nos traen unas bicicletas de policarbonato con materiales de alta tecnológica de la nasa. Cuestan una fortuna y hemos decidió estos y yo estrenarlas tirándonos por aquí.¿ Lo entiendes ya, o te lo vuelve a explicar? Pareces idiota.
-Vale, vale, no hace falta que insultes tío. Hacer lo que queráis, pero daros prisa que esto a mi no me gusta.
Abrieron los maleteros de los dos coches. Sacaron picos, palas, sierras y al perro que llevaban, un enorme rottweiler. Empezaron los chicos a ir monte arriba mientras las chicas se quedaron en el mismo lugar hablando se sus cosas.
Hitler, Hitler ven con nosotras- empezó a llamar al perro Loli y se unieron las otras chicas.
El enorme perro giro sobre si mismo y provocando un gran ruido en su pesado paso a los pocos segundos se unió a las chicas.
Lo rodearon llenándolo de agasajos. Hitler, el rottweiler, se refregaba sobre las faldas de las chicas mientras las seis manos de las chicas acariciaban su cuerpo.
El chucho agradecido del trato, besaba sus manos cubriéndolas de blancas babas mirando a todas partes tratando de atender a la vez a todas las delicadas palabras. Las premiaba con lametones y refriegas.
-Hitler bonito, hitler gracioso, dame la patita chiquitín... -le decían las chicas, hasta que se oyó el silbido de su amo Luis, y abandono a las enternecidas chicas para ir monte arriba.
Subieron dos o tres ribazos.
En el cuarto de dirigieron a la pared de piedra seca del que estaba formado el ribazo. Avanzaban entre las esparragueras, los olivos mortecinos y los algarrobos vegetativos.
Por aquí empezaremos-dijo luis.
¿Por qué? Por qué tu lo digas- Respondió cabreado Juanvi mirándole fijamente a los ojos.
Si, por eso mismo, por qué soy el mejor y el más guay. En todos los campos soy el mejor, nadie me supera, nadie sabe más que yo. Yo y yo, y yo y yo, soy el numero uno.
Pues yo que soy también el número uno, empezare por abajo- comento Andres.
Entre tanto Lucas empezó a derribar el ribazo, todos al verlo se animaron a hacer lo mismo.
Cada uno se busco el ribazo que le pareció. Sin orden ni concierto empezaron a destrozar.
Con gran estruendo fueron demolidos los ribazos. Las hierbas como la lavanda, el romero, el tomillo, las esparragueras caían muertas a golpe de hierro de la azadas o sepultas por las rocas.
Luego cada cual empezó a cortar los arboles que le parecía para que no entorpecieran el descenso de las bicicletas. Cavaron hoyos para aplanar el terreno...
-Parad todos un momento- dijo Lucas limpiándose el polvo sobre su camisa de tirantes.
- Estáis haciéndolo mal. No tenéis ni puta idea de cavar. El pico y la azada se debe levantar por encima de la cabeza. Cuando se baje hay que dejar que descienda través de las manos sin doblar la espalda, dejar bajar los brazos hasta el cuerpo y que caiga el pico o la azada.
-¿Tu de que vas, de listo?- pregunto Luis dirigiéndose hacia el amenazante, irritado y con la cara roja por la ofensa a su orgullo.
-El que no tiene ni puta idea eres tu payaso-Le dijo Rafa a Lucas y luego a Luis. Se cava doblando el lomo, así se trabaja como los hombres. Vosotros sois mariquitas.
-¿Desde cuando eres un experto?- dijo Juanvi que se había acercado desde su ribazo. - Si en tu vida has trabajado. Yo he cavado más que vosotros, pues trabaje arreglando bordillos un par de meses para el Ayuntamiento, y no escuche las milongas que tu cuentas.
- sois unos imbéciles todos- dijo furioso Lucas y tiro la herramienta al suelo.
Todos empezaron a mirarse con asco, odio y desprecio.
A lo lejos se acercaba una persona acompañada de un perro atraída por el ruido y el escándalo en ese lugar donde solía pasear con su perro. Se acerco un tanto perplejo ya que siempre había sido este un lugar de tranquilidad.
Llego en el momento es que se estaban pelando entre ellos al ser incapaces de ponerse de acuerdo en como cavar. Los brazos de los jóvenes ególatras- narcisistas- capitalistas de los golpes estaban doloridos, pero lo más hiriente era la ofensas a sus egos.
Pararon de pelearse cuando estos escucharon la voz del desconocido.
La intención del desconocido era pasar de largo cuando vio el altercado y que se trataba de una pelea de jóvenes. Conocedor de la juventud actual no quería intervenir ya que se temía que correría peligro al hacerlo, pero la destrucción de ese lugar tan emblemático para él le afecto.
Unos ecologistas más sensatos, si se fueron rápidamente. Estaban ya lejos de la pelea. Hacían como si no hubieran visto los ribazos, arboles, arbustos, el patrimonio roto.
Los ecologístas era muy buenos muchachos. Nadie podía decir que hubiera tenido problemas con alguno de los miembros de esta organización. Por eso todo el mundo los quería.
Los constructores no sabían quienes eran. El Ayuntamiento era feliz con ellos, tanto que siempre los premiaba. Los medios de comunicación locales recogían sus gestas de limpiar veredas y plantar uno o dos arboles. Los que hacen trial igualmente los estimaban. Los ciclista de montaña prodigaban su amor por ellos. Los cazadores los veneraban.
En fin, todo el mundo los quería, menos el típico aguafiestas energúmeno que hay en todas partes, en Vall d' Uxo era un tal angelillo.
Si, todos los querían menos el de siempre, es que debían ser muy buena gente.
Los dos miembros de este grupo que iba cantando por el camino, cuando vieron la pelea giraron la cabeza mirando a otra parte. En ella vieron los arboles destrozados por lo cual volvieron a girar la cabeza para observar un cartel anunciando el próximo Pai de hermanos Aventura. Esta empresa convertiría por donde caminaban en un futuro cercano en duro asfalto, y volvieron a girar la cabeza y vieron el desastre urbanístico del pueblo. Se percibía a lo lejos en el horizonte una enorme mole de ladrillo y hormigón caótico llamada Vall d'Uxo, a los que volvieron a girar la cabeza muy azorados.
Como donde se encontraban el terreno no era muy regular, no era cuestión de ir girando la cabeza, sino de mirar al frente. Así que se pusieron a hablar de un viaje que hicieron a Alemania hacia unos días invitados por unos ecologista de Berlín.
-Oye, hay que ver la fuerza que tiene los ecologistas en Alemania- decía uno al otro.
-Si, y lo limpio que están sus bosques, lo bien que construyen los pueblos donde no existe el desastre urbanístico que tenemos nosotros. Parece que tengan a los arboles como sagrados... Hablando de estas cosas siguieron con su paseos en paz, sin discutir con nadie, lamentando la mala suerte que tiene España.
El desconocido paseante, mirando el destrozo que estaban produciendo se dirigió hacia uno de los vándalos preguntándoles:
-¿se puede saber lo que estáis haciendo?- Debió hacer una pausa para respirar pues estaba fatigado. Era un hombre de unos 50 años con problemas de salud con una enfermedad respiratoria.
-Y a ti que te importa lo que hagamos imbécil. Tu no eres nadie, no te vamos a decir nada- le respondió Luis bajando el pico y poniéndolo sobre su rodilla mientras examinaba al hombre
-La verdad es que me importa bastante- le respondió- ya que vivo cerca de aquí y conozco al dueño, . No creo que le guste que unos niñatos le destrocen su propiedad. Yo hace muchos años trabaje en este lugar reparando los ribazos con mi padre. Era un trabajo muy duro, nos daban muy poco. También venia con el tiempo de recoger la aceituna, la algarroba, la almendra, y no quiero que este lugar se pierda. Os lo pido por favor, no los rompáis.
El Juanvi muy nervioso empezó a gritarle:
- te la estas cargando viejo. Vas a pillar, como bajemos te va a caer la del pulpo, desgraciado. Tu no nos dices nada.
Tranquilo y menos chulería. ¿Que creéis, que podéis hacer lo que os da la gana?- Le respondió el hombre muy sofocado.
Lucas con una pala empezó temblando de la rabia a avanzar hacia el hombre, junto su paso sacando los dientes avanzaba Hitler.
Viendo la situación el hombre desistió de su queja. Su cuerpo temblaba de miedo, al igual que el perrito que llevaba al ver al rottweiler.
-Esta bien, os pido perdón, continuar con vuestra labor que no os importunare-les dijo retirándose. Si no te importa, agarra el perro para que no se pelee con el mio.
- Me importa abuelo -le respondió Lucas- No me da la gana agarrarlo ¿No esta el tuyo también suelto?
-Si, es cierto, pero el mio no va sacando los dientes, ahora lo agarro. ¿Ves? Ya esta.
Lucas aun así siguió sin hacer caso, el rottweiler iba a atacar al perrito pequeño que estaba temblando, cuando Juanvi lo llamo:
Ven hitler, ven aquí y deja al cobarde este irse.
El hombre les volvió la espalda mientras los escuchaba reírse y hacer cucamonas a Hitler al que premiaron por su demostración de fuerza con unas galletas.
Siguieron rompiendo la montaña con más saña que antes.
Angelillo con su pastor alemán decidió dar su habitual paseo de la tarde.
Salio de casa rodeando la ermita de San Antonio, justo en el valle contrario donde estaban los jóvenes.
Bajando de la ermita de San Antonio y adentrándose por el paraje de penya creus cruzan un sin fin de trincheras republicanas de la linea XYZ de la guerra civil.
Angelillo disfrutaba mucho paseando lugar dejando volar su imaginación sobre el valor y los principios morales de estos hombres.
Monologaba sobre la guerra civil:
- Si los anarquista hubieran ganado la guerra y hecho la revolución, todo el mundo tendría un trabajo digno, gran cantidad de tiempo libre para vivir, buenas relaciones sociales. La tierra sería un paraíso, pero como no consiguieron ganar debemos trabajar como esclavos para los capitalistas.
Las trincheras eran cortadas por una caseta ilegal.
Era una casa de menos de 10 metros cuadrados, en cuyo origen fue casa de aperos.
Una vez abandonadas las tierras, muerto su propietario, la casa fue ocupada por muchas personas . Gente que vagan por estas tierras moriscas de levante.
Desde hacia un par de semanas había escuchado angelillo que la ocupa una persona misteriosa a la que nadie había conseguido ver el rostro. Hablaban en las plazas de que se trataba de algún indigente anciano.
Cerca del nido de ametralladoras en el que se encontraba angelillo se divisaba ya la casa.
Fue acercándose y conforme lo hacia escucho un aullido ensordecedor, más pareciendo al de un animal pandemonico que al de una persona. El aullido causo que el pastor alemán empezara a ladrar con los pelo erizado, e hizo que angelillo se dirigiera corriendo a la casa.
Encontró en ella aun anciano tirado por el suelo revolcándose como un poseso. Sus ojos estaban en blanco y su cuerpo se agitaba convulsivamente por el suelo.
Le salia espuma por la boca de la cual escupía saliva.
Angelillo avanzo hasta él, cogió un pequeño palo y lo introdujo en su boca para que no se tragara la lengua y muriera.
La frente del anciano estaba bañada en sudor.
Poco a poco fue reponiéndose, su cuerpo empezó a agitarse a menor velocidad. El tono azulado de su piel fue transformándose en rosada.
Los ojos del anciano se clavaron brillantes como las ascuas ardientes del fuego en angelillo que estaba inclinado sobre él.
-¿ se encuentra mejor?- le pregunto.
-Si respondió este.
-Poco a poco se fue incorporando como si nada hubiera pasado.
Al levantarse se sentó en una piedra apoyada frente a una pared de la casa.
Recuperada la consciencia empezó a hablar mirando al vacío, mientras un hilo de babas blancas y espumosas caía en forma de gotas al suelo contra el que se rompían.
Lanzo un aullido ensordecedor y comenzó un monologo en voz alta, versando sobre su visión en el ataque epiléptico:
-Ahag, trompetas del apocalipsis tocadas por ángeles descarnados. Serafines de esqueletos negros y verdes musgosos con alas blancas llenas de manchas de inmundo lodo. Tocáis las trompetas del juicio final cuyo ruido resuena en mi mente.
Ángeles a los que reconozco las caras, bajáis del cielo en tropel. Esta ella con ellos mi amor.
Fue la primera, fue la primera que... ! malditos ángeles siempre ordenándome matar!
Sobrevuelan un cielo tormentosos llenos de relámpagos y truenos por los que pasan rozándolos con sus alas, que al contacto con el rayo empiezan a arder. Envueltos en llamas siguen volando extendiendo su estela por el firmamento. Suben a la luna, a Júpiter, a marte ,y descienden en picado a nuestra esfera ordenándome matar.
Seguía hablando el anciano de cosas ininteligibles para cualquier otro que no fuera él, presa todavía del ataque:
-Ella que tanto amaba, esta con ellos desnuda. Los ángeles muerden su sexo con su carne por terminar de pudrir. Manda que la vengue, yo no la mete.
La tierra esta llena de legionarios, tanques y hombres matándonos en las dunas del desierto de marruecos. Luchan por sobrevivir.
Los legionarios hablan con los ángeles y les sonríen, la guardia civil abraza los esqueletos. Los legionarios y guardia civiles están frente a los ángeles que en el aire detenidos levitan sobre sus cabezas.
Cada legionario y guardia civil tiene enfrente un serafín. Todos se sonríen. Las calaveras abren los labios y sacan una gran lengua envuelta en llamas que se mete por la boca de los legionarios y los guardias civiles poseyéndolos con un espíritu maligno. Endiablados por este espíritu son capaces de hacer cualquier salvajada sobre sus semejantes. Ahag.
Tras escucharse el ultimo aullido volvió en si del todo, mirando con extrañeza a angelillo que estaba de rodillas sujetando las manos del pobre viejo.
El anciano le miro con ternura.
¿Se encuentras mejor?- le pregunto angelillo.
Si- respondió conmovido-esto que me pasa es frecuente en mi. Yo no hago mucho caso a los achaques. No creo que sea importante.
Yo tampoco creo que tenga mucha importancia-le respondió angelillo- cada cual, como usted dice tiene lo suyo, pequeños achaques. Lo que pasa que la gente de hoy en día esta obsesionado con el cuerpo. Yo conozco gente que sin estar enferma va al ambulatorio a hacerse pruebas medicas para ver si tiene bien las vitaminas, el hierro... Y le hablo de gente que corre por la montaña más de 20 kilómetros sin cansarse. ¿Puede creerlo?
Cuando se resfrían se ponen mascarillas. ! Malditos psicóticos!
Me alegro de una ver una persona que piensa de forma diferente. Yo conozco gente que por este ataque sin importancia habría ido llorando al hospital.
Hace tiempo que no hablo con personas¿ de verdad pasa eso?- dijo asombrado el anciano extrañado.
Y cosas peores. Si le contará... es muy complicado hoy en día soportar a la gente que nos rodea. Yo mismo que soy la persona más tolerante y comprensiva del mundo me cuesta en ocasiones mantener mi talante.
¿Puedo hacerle una pregunta? ¿ Vive usted aquí?
Aquí vivo- respondió el anciano. No se si estaré mucho. Encontré esta casa y me he quedado de momento. Como por aquí hay un pequeño aljibe y la tierra es buena estaré algo de tiempo. Por lo menos hasta recoger la cosecha, después me marchare. Soy persona que me gusta mucho caminar por los caminos.
La verdad es que ha hecho usted un buen trabajo arreglando la casa. Hace un mes no tenia techo, creía que se caería. Sus últimos moradores no hicieron nada por arreglarla. Veo que ha colocado una chapa como techo; plásticos y cartones en las ventanas para que no entre el viento, y una cortina de ducha con dibujos del pato donals por puerta. Realmente tiene un aspecto acogedor.
Gracias-le dijo el anciano conmovido de que su trabajo fuera reconocido.
En la parte posterior de la casa había un pequeño huerto cercano a un pequeño basurero, durante años habían tirado todo tipo de trastos. Entre tierra rojiza y negra surgían unas verdes y raquíticas acelgas, seguramente por falta de abono. Unas tristes habas repletas de flores completaban la huerta.
- No tiene sembrado mucho, pero pese a la falta de agua esta bonita la huerta- le comento angelillo.
-Si, es mi alegría ver como surge de la tierra la comida- le respondió el anciano- yo me siento todos los días a ver como crecen. De vez en cuando las regó, pero no me mato en el trabajo ¿comprende?
-! A mi me va a contar!- respondió angelillo experto en estos menesteres-Realmente el campo por mucho que los burgueses quieran hacernos creer sobre su sacrificio no es duro- asevero lleno de sabiduría.
Yo tengo una huerta muy florida y no hago nada. Regó una vez al mes y todo crece para alimentarme.
Estoy sorprendido de conocer a una persona tan integra como usted. Este sitio me da muy buen karma. Me es grato encontrar a una persona que vive con tanta armonía y paz de espíritu. En estos momentos soy consciente de estar ante el primer verdadero ecologista que he visto en mi vida, y no los papanatas que conozco que se llenan la boca diciendo que lo son. Lo que son es canalla burguesa llena de ambiciones.
Ellos seguro que no querrían vivir como usted, conformándose con tan poco.
Si viera el dinero que manejan algunos. Lo comodones que son, su nula capacidad de pobreza y resistencia psicológica. Son esclavos dóciles a las consignas de las organizaciones laborales en las que trabajan. Le daría asco a una persona que vive como usted el ver como lo hacen ellos. Y su cobarde predisposición a adaptarse para sobrevivir.
- !Ahg!- volvió a lanzar un aullido ensordecer el anciano que desgarro el tierno corazón de angelillo.
- No me hables de sindicatos, ni ecologistas. Conozco lo pérfidos y mezquinos que son.
¿Sabes por que vivo solo y alejado de la sociedad?
Pues lo hago porque yo creía en ellos. He visto como se venden, pero yo tenía mis principios y no deje que los pisotearan. Ni tu debes hacer lo mismo. Yo empece una revolución social solitaria y me gustaría que tu hicieras lo mismo, al margen de esos filisteos. ¿Como te llamas chico?
- Me conocen como angelillo el Valenciano, pues de esta ciudad procedo.
-A mi me llaman Manuel Delgado Villegas, y de mote es el arropiero- dijo el anciano presentándose.
-¿Como? - dijo angelillo lleno de asombro- ¿el arropiero? el mayor criminal en serie de España. Causante de 48 asesinato y muerto en 1998.¿ Será obra del diablo o de la insensata locura lo que me dice? el hombre del que usted habla hace 12 años que su cuerpo arde en el infierno.
-No angelillo. Te rogaría que escucharas mi historia. Veras como el arropiero no es tan malo como dicen, y no esta muerto. Siéntate a mi lado y Escucha:
Historia del arropiero.
Mi nombre como te he dicho es Manuel Delgado Villegas. Nací en Sevilla el 25 de enero del año 1943. Al nacer yo, murió mi madre. Muchos en mi infancia me lo tiraron en cara, siempre sentí esta gran pena de que mi alumbramiento hubiera causado una muerte. Fue mi infancia en una Sevilla envuelta en luto, misterios y religión cristiana . Mis estigmas fueron creciendo en la escuela por no conseguir aprender a leer y a escribir. Yo me revelaba contra ese sistema que atonta a las personas. Les quita la libertad, les modifica la personalidad. Yo quería lanzarme a andar por el mundo, por eso me salí de la escuela para acompañar a mi padre que era vendedor ambulante de arrope, una especie de mermelada o miel diluida en agua hecha de algarroba, almendra y otros frutos secos.
Mi padre y yo la fabricábamos para venderla. Era trabajo duro pero grato. Siempre por las veredas caminando. Pronto la gente sabiendo de mis deficiencias en la escritura y las cuentas hacia de mi mucha burla. Al igual que las muchachas, yo siempre como es cosa natural andaba enamorado, y por verme en este oficio todas reían llamándome tonto y fracasado. Fue como he dicho una infancia muy dura. Yo no sabia nada de la vida, ni la maldad humana. Por entonces era como todo el mundo: un ser mezquino preocupado por el futuro. Lleno de miedos, incertidumbre ante la imposibilidad de realizarme, un cobarde más.
Viéndome reducido a pasar una vida miserable vendiendo arrope, o trabajando como jornalero para un terrateniente, no encontré más solución que alistarme en la legión.
España había sufrido un revés muy importante en Sidi Ifni dos años antes, y andaba el ejercito falangista muy revuelto. Los oficiales eran diablos.
Ahg!- Aulló-Me aliste por desesperación, por hambre.
Estaba la legión repleta de penados de la peor calaña, a los que daban elegir prisión o legión. Con decirte eso puede imaginar el ambiente.
De comer y dinero nos daban poco y mal. Palos y humillaciones la gana.
En las caminatas nos reventaban a correr. Por la noches estaban las sacas. Entraban dos o tres soldados de otro batallón mientras dormíamos y agarraba a unos cuantos de las literas. A golpes nos llevaban a bañeras llenas de agua helada en las que nos provocaban ahogamientos simulados para observar nuestras capacidad de aguante a la tortura. Después nos ataban a unos potros y empezaba a abofetearnos.
Tras hacernos esto nos dejaban en el cuarto descansar una hora, luego tocaba diana y otra vez a correr.
Había días que nos mandaba ir por las calles y alrededores de Sevilla buscando perros. Todos debíamos volver al cuartel con algún perro. De lo contrario el sargento nos pegaban una paliza y hacer mil flexiones.
A los perros capturados mandaban amarrarlos a unos postes en forma de aspas. Cada pata del animal se ponía en un extremo de los madero, quedando los perros que no paraban de ladrar en el centro de las maderas con el vientre cara a nosotros. Un cabo nos mandaba colocar las bayonetas sobre el fusil y cargar contra los perros. Los matábamos a bayonetazos. Esta es la forma de adiestrar en la legión.
Un día conocí a unos anarquistas en un bar de Sevilla.
Era buena gente que luchaba contra la terrible tiranía de los falangistas de Franco.
Yo no les dije que era legionario los primeros días para no perder su amistad. Poco a poco fue creciendo. Un día estalle en la taberna en un gran llanto repleto de desesperación, contándoles como había ido a parar en la legión por inculto, y sobre mi deseo de desertar.
Se humanizaron como no podía ser de otra manera tratándose de esta gente. Decidieron ayudarme. Insistieron en enseñarme a leer. Con su métodos dulces aprendí, lejos de la rudeza de los maestros de la escuela.
Me contaron cosas maravillosas de la libertad, de Bakunin, Malatesta, etc.
!Esos si eran anarquistas! los que luchaban contra la dictadura. Dicen que los de ahora hacen poco. El caso es que embriagado por esos sentimientos de libertad decidí escapar del cuartel y del país.
Se lo comente a mi amigos anarquistas, y me ayudaron a elaborar un plan de fuga. Me ofrecieron asilo en Italia, la patria angiolillo y otros grandes anarquista.
En aquel momento Italia era un país casi en guerra civil. Los anarquista, las brigadas rojas, estaban muy fuertes y dispuestos a hacer una revolución. En ese país tenían contacto que cuidarían de mi persona.
El plan de fuga del cuartel era muy sencillo. Los viernes por la tarde los oficiales y suboficiales mandaban traer una caravana de prostitutas y gitanas forzadas para que pasaran la noche con ellos.
Los que hacían guardia solían ir a ver en unos agujeros hechos para tal fin las escenas amorosas. Yo saldría del barracón vestido de gitana con un gran velo repleto de cascabeles y una pandereta. Los anarquista a una hora convenida mandarían a una joven prostituta con un pellejo repleto de vino para dar a los dos guardias. Mientras ellos se emborrachaban yo pasaría bailando y tocando la pandereta. Los guardias intentarían violarme, y los anarquistas ocultos en unos matorrales abrirían las navajas degollando a los soldados.
Así lo hicimos, y todo fue de acuerdo con el plan, solo que yo me anticipe a los anarquistas en matar a los soldados, pues tenía con uno de ellos una deuda pendiente.
En una ocasión tras robar unas tabletas de chocolate Ramirez me acuso a mi de haberlo hecho al Cabo Arrencilla. Este me azoto muy duramente.
La ocasión de revancha se me presentaba al estar esa semana de guardia.
La verdad es que ensañe, 56 puñaladas le di por la tableta de chocolate.
Conseguí salir de España.
Caminaba por Francia para llegar a Italia y allí tuve que matar por justicia.
Trabaje en un bar de Millau, pueblo situado en el macizo francés, cerca del lago l'Haraut.
El dueño era un hombre sin escrúpulos, un mesonero gordo llamado Dartañan. Era muy duro conmigo. Sabía que estaba buscado en España al reconocerme los tatuajes de la legión, por eso me tenia como esclavo.
Denuncie mi situación a un compañero delegado sindical, pero era un racista. Me dijo que le daba igual mis problemas, así que lo mate estrangulándolo. Odiaba a los españoles por encima de todos sus otros odios sin que nunca supiera por qué, ya que lo asesine. A Dartañan por explotador también lo estrangule.
Todos mis crímenes han sido de esta índole. Crímenes de justicia social, justificables para un pobre como yo.
-Todo lo que me dices arropiero es lógico. Cualquier ser humano decente, honesto, justo y bueno habría hecho lo mismo. Yo juro por Dios que lo hubiera hecho lo mismo que tu. Eres una persona de honor y buena. Pero hay lagunas que no entiendo. ¿ tu captura, tu fama y tu muerte?
-Te lo contare angelillo.
La captura del Arropiero y su vida después de muerto.
Volví tras pasar felices años en Italia a España por el mismo camino de vuelta. Matando a quien debía matar. Quería volver para luchar contra el Franquismo, pues en Italia me había embriagado de las luchas sociales de este país. No lo hice con las brigadas rojas, ni con los anarquistas. Yo luche con un grupo de bandidos. Vivíamos en la ladera de una de las siete colinas de Roma, la de Appia Antica, donde se encuentran unas catacumbas laberínticas de más de 40 kilómetros, excavadas sobre piedras volcánicas por los primeros cristianos.
Sobrevivíamos entrando en las casas de los empresarios. Les robamos y asesinábamos para que no explotaran a los trabajadores. Parte del dinero iba para los pobres, especialmente los vagabundos. Empece a pensar que sería bueno establecer estos métodos en España, y por eso vine. Durante años hice mucho mal a la clase empresarial. Pero cometí un error. Robe en el palacio de los Duques de Medinaceli con la metodología habitual: Robar y matar.
En este piso, la noche en que libraba el personal había un trabajador. Luego me entere que era un esquirol deseoso de ascender. Fue su ambición mi ruina. ! Se quedaba hasta los festivos trabajando! La verdad es que me pillo en plena faena. Yo tuve compasión de este. Tenía el grado de mayordomo. Cargo conseguido por las malas artes de la sumisión y auto promoción. Pensé que se alegraría de que hubiera matado al señor Duque y la Duquesa después de forzarla, cosa que hacía únicamente con la aristocracia. Al principio me sonrió el lacayo, y no le di mayor importancia. Silbando salí por la puerta principal. Caminaba sin ser consciente que este me seguía a escondidas y descubrió mi cuartel. Por entonces yo ocupaba un viejo panteón en el cementerio municipal. Dormía entre los héroes del 2 de Mayo cuando aparecieron una patrulla de grises que me detuvieron.
Como el estado temía mi vía revolucionaria, al igual que ahora temen la estrategia revolucionaria de las bandas de albano-kosovares, que tanto bien están haciendo robando las ilícitas fortunas de constructores y banqueros.
El estado español temeroso de mí empezó a divulgar el mensaje que conoces.
Me trataron de loco e intentaron volverme así. Llevaron mi cuerpo a un psiquiátrico donde me introducían amital sódico para que hablara y les dijera si trabajaba con ETA, si tenía conexiones con agentes de Venezuela o Cuba. A estos países, para que veas lo poco que cambian las cosas y los regímenes, los trataban ya de terroristas.
Yo les decía que estaba solo, que era un hombre disidente del sistema y mi único sustento, mi única forma de sobrevivir era matando.
Me ponían películas violentas para perturbar mi juicio y mi mensaje. No me dejaban dormir. Cuando descansaba encendían las luces que perforaban mis pupilas, o me ponían música muy fuerte. Me medicaban constantemente hasta hacerme un zombi.
Incluso me realizaron operaciones cerebrales en las cuales me extirparon los lóbulos temporales, causando mis ataques de epilepsia.
Estaban apunto de sacrificarme cuando el psiquiatra que dirigía todos los experimentos, hijo de un coronel falangista legionario se apiado de mi por haber estado en el ejercito. Ideo un plan para sacarme.
Yo estaba en el psiquiátrico del Puerto de Santa María. El día del patrón se celebra una gran feria.
Por la noche se lanza un gran espectáculo pirotécnico en el centro de la ciudad. El doctor compraría de la feria una gran cantidad de globos de helio que inflaría mientras los guardias miraban el espectáculo. En ese momento aprovecharía para abrir mi celda y subirme a la azotea. El doctor me ataría a una camisa de fuerza de la que penderían una gran cantidad de globos de helio haciendo de mi un zepelin humano. El plan funciono, pero no como deseamos. Me tire azote abajo pero los globos no pudieron con mi peso y apenas restaron fuerza a mi caída. El golpe que me di fue tremendo y quede tendido inconsciente en la acera. Como ese día se celebraban las chirigotas, unos borrachos que pasaban me confundieron con un miembro de su comparsa ya iban disfrazados de locos, así que me llevaron con ellos. El doctor entretanto saco de la nevera de su despacho un vagabundo muerto muy parecido a mí que encontró en un poblado chabolista de Sevilla, y lo hizo pasar por mi persona.
-Es fascinante tu vida arropiero, y tu buen juicio. Eres la persona más comprometida con la que he hablado. Ojala hubiera mas revolucionarios como tu, los necesitamos.
Supongo que estos días estarás por aquí todavía ¿No?
-Si- le contesto el arropiero.
-Pues ya nos veremos, ahora debo irme, vendré maña a hablar contigo.
Angelillo se fue a su casa feliz de haber encontrado un amigo tan sensato. Por fin tenía alguien con quien hablar de sus preocupaciones de forma razonable. Alguien con el que compartía los mismos valores sobre la ecología, la vida austera, el compromiso social, la militancia...
Caminaba angelillo por el escabroso camino lleno de matorrales que conduce a su hogar emocionado por el recuerdo del arropiero, comparando después de hablar con él las conversaciones mantenidas de la gente que le rodea: vecinos, familiares, sindicalistas, amigos, compañeros forzosos de estos que te encuentras en los trabajos, en los cursillos del paro, en las universidades...
En su retorica, en la justificación de su moral y de sus ideas !Que buenos sentimientos tienen! Cuanto estas personas que se califican de adaptados, se preocupan y quieren a los demás.
Ninguno es egoísta. Ninguno es un hipócrita.
! Todos y todas son felices y comen perdices!
!Ninguno esta quemado!
El corazón de angelillo latía lleno de una gran pasión por haber encontrado por primera vez una persona a la que amar. Aunque grandes dudas crecían como tempestades en su alma abrasándola . ¿Sería capaz de retener al arropiero a su lado, o sería ave de paso que se aleja con el cambio de estación?
Durmió teniendo hermosos sueños, al igual que el arropiero con sus ángeles del apocalipsis.
Al día siguiente fue a ver corriendo a arropiero y salieron a pasear.
En las inmediaciones de la casa del arropiero Juanvi, Luis saltaron un ribazo que se encontraba bajo de la casa.
-Mira que casa más cutre-dijo Juanvi riendo.
-Sera de algún ocupa guarro de esos- Respondió Luis.
- Oye, ya estamos en la alto de camino, hemos terminado la pista- comento Juanvi- Llama a las chicas y sobre todo a Lucas, que cargue la furgoneta con las bicis y nos tiraremos. Lo haremos por encima de la casa. Coge estas maderas de dentro de la casa, la que sirve de mesa y la pondremos en el techo para utilizarla de puente con el ribazo que esta encima, y saltaremos.
-Porque tu lo digas, yo a ti no te obedezco- respondió Luis.
-Si lo harás, coge la puta tabla- le dijo alterado Juanvi chillando.
-Jamas, saltaremos sin la tabla.- le grito luis mostrando la vena tonta de la frente.
Empezaron a empujarse.
Juanvi al final cogió la tabla solo y la coloco.
Entre tanto Luis empezó a mear sobre las acelgas del arropiero.
-Voy a destrozar la cosecha de los ocupas asquerosos estos-dijo sonriendo Luis destrozando la huerta.
Juanvi que había puesto la tabla le ayudo. Se tiro del techo al campo y empezó a romperlo.
Llego la furgoneta. Bajaron Lucas, Rafa , Eva y Sonia.
Que casa más cutre dijo Eva mientras se atusaba el pelo y colocando los dedos en la nariz a modo de no querer oler, como si lo que hubiera allí pudiera afectarle y contaminar su aroma de perfume caro de la tienda druni de la que venia.
Estrenemos la pista, hagamos una carrera- dijo Rafa.
Yo no estoy de acuerdo-dijo Juanvi, primero tanteemos por si debemos romper algo más.
Pues yo quiero carrera- dijo luis.
Empezó la pelea entre ellos. Tras pelearse se tiraron cuesta abajo.
Se fueron de allí una vez terminado el descenso.
Entre tanto llego angelillo y el arropiero que se escandalizo al ver la destroza.
-Ahg- grito el arropiero y cayo al suelo revolcándose por la tierra esparcida. Sus ojos se volvieron sobre si mismo provocados por el ataque epiléptico y empezó a hablar de la legión, del desierto, de ella...
Angelillo no se movió de su lado. Cuando estuvo más calmado, angelillo abandonando en su descanso al arropiero examino las huella. Vio que se trataba de ciclistas. Llevaba tras ellos varios días. Esta vez se volvieron a adelantar. Sabía de quienes se trataba: el grupo terratremol. Una banda de ciclistas causantes de muchos desordenes en el territorio.
Tranquilo arropiero, nos vengaremos. No tardaran en volver. La harán mañana y serán nuestros.
Se despidieron.
El arropiero al despertarse al día siguiente decidió quedarse por allí escondido.
Al día siguiente los teléfonos de los móviles arrancaban. Juanvi hablaban con Luis.
Oye tio-decía Junavi- debo irme a castellón con mi padre.¿ Por qué no vais, tu, Rafa Eva y Sonia a la pista. He llamado a Lola dice que después iría con Lucas llevando comida del Mac Donals.
-La verdad es que no tengo muchas ganas. Me lo pensare y te digo. Estoy jugando aun video-juego de matar vagabundos- dijo Luis con voz de sueño.
Al cabo de un par de horas cansado de matar vagabundos, Luis llamo a la panda que estaba libre y fueron.
El arropiero los vio llegar.
Estaban: Luis, Rafa; Eva y Sonia.
Amagado en unos matorrales el arropiero escuchaba:
-Yo también quiero tirarme con la bicicleta-dijo Eva agarrando la bici de Luis.
-¿Tu ?- dijo este- ¿Que sabes de bicicletas tía?
-Más de lo que te imaginas, y ademas dejamos a Sonia con Rafa solos. Ella quiere algo con él ,y tu puedes tener lo mismo.
-¿Pero Sonia no estaba con un tal Pepe?-le pregunto Luis.
-Eso fue ayer. Le dejaremos a solas, quieren estar en la casa de los ocupas. Tirémonos tu y yo.
-Vale- dijo Luis. Sube arriba del ribazo y agarra impuso para saltar por el ribazo al techo de la casa y caer a la pista. Cuando toques el suelo paladea muy fuerte.
Asistió con la cabeza Eva. Saltaron sin problemas e iban monte abajo.
Entre tanto Rafa cogió a Sonia de la cintura.
-Tía me molas un montón- le dijo Rafa.
-Y tu mas tío-dijo Sonia receptiva.
Rafa le quito la camiseta quedando al descubierto unos pechos enormes, firmes y perfumados.
Salio de los matorrales el arropiero y de un golpe que aprendió en la legión derribo a Rafa. Quedo inconsciente.
Sonia sin comprender lo que pasaba se quedo petrificada.
El arropiero avanzaba aullando hacia ella.
-Por favor tío, no me hagas nada. ¿ quieres pasta? toma mi bolso, hay 30 euros.
-No quiero nada de vosotros-le dijo furioso el arropiero- más que venganza ¿Por que me habéis roto la casa, la huerta, los bancales?
- Yo no se nada, no sabia que era de usted-balbuceaba Sonia llorando. Creíamos que era de unos ocupas. Perdóneme por favor.
-No habrá perdón- le dijo el arropiero.
Cogió una enorme piedra que levanto con toda la facilidad del mundo y la estampo contra su frente La frente de Sonia se quebró como un huevo. Del impacto de la piedra contra la frente los ojos le salieron volando, cayendo a unos metros de su cuerpo. Su nariz se hundió rompiéndose en mil pedazos.
Sonia empezó a dar unos chillidos insoportables. Lo que segundos antes era un chica en pleno desarrollo, hermosa. Se había convertido en una figura obscena y espantosa.
El arropiero la estrangulo poco a poco. Luego se fue hacia Rafa que empezaba a despertar. Lo agarro llevándolo a una rama de algarrobo y allí lo ahorco.
De la fatiga del combate decidió descansar tumbándose bajo la sombra del ahorcado, señal de buen agüero. Tuvo unos sueños oníricos muy reconstituyentes de los que fue expulsado al escuchar unos sonidos metálicos.
Era el ruido de las bicicletas empujadas por Luis y Eva que subían por los ribazos riendo y dándose besos.
-Ahora veras estos lo que están haciendo-decía sonriendo Eva.
Cuando llegaron a la casa se quedaron sorprendidos de que no hubiera nadie. Empezaron a llamar a Eva y Rafa.
¿ Donde os habéis escondido?-pregunto Luis riendo.
- Anda Eva- dijo pegando una palmada en el culo - ve por ahí ,que yo iré por aquí. A ver si los descubrimos. Cuando lo hagas me llamas.
El arropiero por los matorrales se desplazaba detrás de Luis sin que lo viera.
Luis encontró los cadáveres.
Ante su visión se quedo congelado. El arropiero le ataco por la espalda dándole un golpe con la mano abierta en la nuca. Quedo inconsciente y lo ato amordazándolo.
Entre tanto volvía Eva llamando a Luis.
Como no contestaba, ni respondía al móvil como tampoco lo hacia Sonia, ni Rafa, llamo a Lucas y a Juanvi para que fueran a la pista de San Antonio.
Estos acababan de llegar del corte ingles de comprarse camisetas ultima marca.
El arropiero salio detrás de ella y le tiro una cuerda al cuello a modo de lazo.
Esta empezó a pegar patadas y se volvió arañando al anciano.
El arropiero le pego un puñetazo en la mandíbula que se le saco del sitio.
Del golpe apenas podía hablar.
Llevo a los dos rehenes atados y amordazados a un árbol. Entre tanto llego angelillo.
-Arropiero- exclamo angelillo-!Que buena caza has hecho!
-Estos son los niñatos que han destrozado todo esto- le dijo el arropiero.
Quisiera si que permitieras amigo saber si son los que persigo-le dijo angelillo al arropiero, y dirigiéndose a Luis tras quitarle la mordaza le pregunto:
¿Sois del grupo de ciclista de vall d' uxo llamado terratremols?
-Si gilipollas- le dijo este- haz el favor de soltarnos o te rajamos. Vais a ir a la policía, mi padre es guardia civil, cuando os coja os va a dar de ostias, cerdos. Soltarnos inmediatamente.
-¿Eres un poco maleducado, no?- le contesto angelillo- La verdad es que tenía ganas de hablar con vosotros. Veo que sois tan chulos como me habían contado. ¿Pero no crees que este no es momento para chulería?
-Soltarnos ya- dijo la chica- mi padre es concejal de PP e instigador de la propuesta de cadena perpetua y cumplimiento de penas integras. La habéis jodido tios. Esto lo pagareis caro. He llamado por teléfono a unos amigos, viene hacia aquí.
Angelillo dirigiéndose al arropiero riendo y con resignación de tener que escuchar a estos chillos le guiño el ojo lleno de complicidad.
- Como ves amigo, vamos a tener que educar a estos niños. Creo que sus padre, sus profesores, la televisión, no han cumplido con su deber educativo. Es el momento de enseñarles modales.
Angelillo cogiendo una navaja le corto la tela de la camisa a Luis, dejando su fornida espalda de gimnasio al descubierto. A Eva le bajo los pantalones dejando ver un impresionante trasero cubierto con un ligero tanga.
Angelillo se quito su cinturón correctivo. Era un cinto de duro cuero, muy grueso y con una hebilla de metal.
Se arremango la camisa y con todas sus fuerzas empezó a azotar a Luis. Su carne se volvió roja y empezó a manar sangre.
Tras varios azotes la carne y la sangre saltaba por los aires salpicando los labios de angelillo y el arropiero. Cuando termino el correctivo de Luis empezó con Eva.
Le azoto en las nalgas, a los pocos golpes sus tiernas nalgas se abrieron y empezaba a caer con la sangre pequeñas gotas de grasa blanca, ya que la hebilla perforaba la carne. Le desgarro las nalgas completamente.
La chulería de estos chicos había descendido, calificando como éxito este tratamiento.
Entre tanto, el arropiero había pedido permiso a angelillo para ir a dormir bajo el ahorcado mientras este los educaba.
La suave brisa mecía el cuerpo de Rafa, y el sonido de la cuerda con su cuerpo colgando relajaba al arropiero que dormía bajo la horca.
Tan hermoso era su sueño que empezó a roncar. Angelillo disfruto mucho de la pastoril escena de paz.
Entre tanto Juanvi y Lola llegaron dando voces llamando a sus amigos.
El arropiero despertó y fue hacia las voces. Juanvi lo miro con desprecio y asco. Le giro la cara al igual que Lola, cosa muy habitual entre los jóvenes cuando pasan junto alguien.
-Buscáis a unos chicos- les dijo cuando pasaron con la cara girada por su lado.
A ti no te importa, viejo- le contesto con desprecio Lola.
El arropiero dejo que se alejaran. Cuando le volvieron la espalda cargo sobre Juanvi dándole un golpe tan fuerte en la cabeza con una gruesa rama que lo mato al instante.
Angelillo se lanzó sobre Lola.
La amarro y condujo al pilón donde había estado Eva.
Como el tratamiento con esta fue muy positivo quiso replicar el experimento, consiguiendo idénticos resultados.
Atardeció y Angelillo se fue a casa.
El arropiero paso la noche bajo el ahorcado, y dudo en si ahorcar a los otros, pero como prometió no hacerlo pues angelillo le aseguro que podía enderezar a estos chicos, no lo hizo.
Él era una persona menos optimista y no creía que un capitalista-pijo se pudiera curar.
Se equivocaba.
Durante varios días estuvieron aplicando los cuidados necesarios a estos jóvenes, y finalmente curaron.
Al soltarlos sus padres no los reconocieron. Habían cambiado para bien.
Ayudaban en las tareas de la casa, eran respetuosos con la gente. Ya no volvían la cara a quien se cruzaba en su camino, daban como las personas los buenos días... Eran considerados con la tercera edad. Realizaban trabajos sociales ayudando a los ancianos de la residencia...
Todo el mundo estaba muy contento con ellos.
Ellos nunca dijeron los nombres de quien los curaron ya que cuando los soltaron, tras besar las manos en agradecimiento a angelillo y el arropiero, prometieron que nunca dirían quien les ayudo a salir del mal camino que llevaban.
Angelillo convencido en que otro mundo es posible.
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