Si los jueces en vez de ser los hombres que se alimentan de
los crímenes que otros cometen fueran cuervos, habría igual justicia que siendo
hombres.
Y si los que son juzgados fueran presas de los cuervos, veríamos que pagan con su carne por
el delito que otros cometen y que nunca son juzgados porque la justicia no
existe ni puede existir y si se hiciera sería algo terrible para la humanidad
entera.
así los jueces haciendo su papel de cuervos irían de rama en rama persiguiendo la presa
herida graznando:
Ya caerás.
Pero los jueces son humanos y no cuervos,
por eso se reúnen en una gran sala y allí permanecen sentados en lo alto de un entarimado
escuchando a un humano atrapado que va tropezando con las preguntas del fiscal
mientras graznan los jueces:
Ya caerás.
Si la persona atrapada en vez de un hombre fuera una pieza
de caza perseguida , como por ejemplo un zorro herido, celebraría incluso
estando herida y pese a que el mundo se le hace un estrecho agujero, haber escapado
del cazador que la ha malherido, pero sentiría terror al ver a ese cuervo que
en otras circunstancia no temería.
Pero los jueces son hombres y no cuervos, por eso se regocijan ante el temor y las sacudidas
nerviosas que tiene el detenido por algo que le va a venir y ya no puede
evitar, y porque no es un zorro el detenido sino un humano , al final ha de
confesar para que se acabe todo pronto:
Soy culpable señoría “de los cargos.”
Pero tengan compasión,
no hice nada por
maldad,
Solo por dinero.
Los jueces entonces se conmueven y graznan desde su
conciencia:
El arrepentimiento ha llegado pronto a este hombre, ha
confesado desde el hígado, vamos a
graznar para celebrarlo:
Despejen la gran sala
vamos a dictar sentencia.
Un gran aleteo se forma entre las sillas,
y negras formas unen sus cabezas mirando oraciones carentes de algo siquiera parecido a la justicia:
se escucha en la gran sala un graznido:
ya has caído.
Culpable.
Angelillo de Uixó.
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario