miércoles, 23 de marzo de 2011

El retorno del Rey Cardau, leyendas gitanas y de anti sistemas










El retorno del Rey Morisco Cardau, leyenda de anti sistema y gitanos.

Angelillo y Jesús son dos trabajadores de la agricultura ecológica en un pueblo de la comunidad valenciana llamado el valle de Uíxo. Este es un lugar bastante aburrido, donde el desempleo, el clima de corrupción, la mentalidad conformistas y tradicionalista de sus gentes que viven pensando en tener un empleo, obtener dinero, en las fiestas patronales y en los momentos de vicio bastante vulgares los sábados por la noche, hace de este lugar un sitio donde el plantar patatas puede ser una buena alternativa al suicidio.
La Comunidad Valencia presume de tener las mejores huertas de Europa, grupos ecologistas comprometidos con el medio ambiente, instituciones que favorecen la agricultura, comercios y consumidores simpatizantes con la eco causa.
Lo cierto es que quitando esta poética agrícola a lo Fukuoka, el profesor Millagui o a lo Antonio Machado que otorga esperanza a los desahuciados como Angelillo y Jesús, los trabajadores de la agricultura ecológica son personas pobres, denostadas y perseguidas por las autoridades, como en otro tiempo lo fue otro colectivo de esta tierra: el de los moriscos.
Esta huella morisca por mucho que quieran taparla las autoridades que dicen que venimos del visigodo y el romano esta presente en el día a día en las tierras de levante.
De hecho Angelillo y Jesús labrando sus campos encontraban cerámica morisca y comentaban entre ellos los hallazgos:
-Jesús- le decía Angelillo contemplando los restos extraídos de la tierra de algún cántaro hecho hace siglos- el corazón me dice que por aquí debió haber alguna morería.
-Quía, quía- contestaba Jesús mirando los restos sin darle importancia- a ver si te crees que aquí estuvo Cardau comiendo sopas.
Lo que no sabia Angelillo ni Jesús es que justamente donde habían plantado unas tomateras se situó hacía 400 años el cuartel general de la resistencia morisca que capitaneaba Cardau, el rey morisco. El mismísimo que se enfrento a las tropas del duque de Segorbe en Ain derrotándolas en el primer ataque.
Los moriscos se pueden entender hoy en día como los fundadores de los movimientos de disidencia, anti sistema y los pioneros de la agricultura ecológica en España.
Los militantes de los colectivos anti sistema, los sindicalistas anarquistas y los parados, todos ellos enarbolan la misma bandera que la de los moriscos.
Se enfrentan a la misma suerte de aquellas gentes:
Luchar contra un sistema que les obligaba a ser como ellos no quieren ser.
Conversión al sistema o exclusión social es la disyuntiva en la cual se encuentran los colectivos sociales y varios millones de habitantes perseguidos por el régimen fundamentalista-capitalista-democrático.
Realmente los moriscos son gente que luchó y perdió contra un sistema igual de injusto que el actual. Es decir sufrieron el mismo sino que los movimientos anarquistas y de extrema izquierda radical.
Salvando las distancias históricas se puede afirmar que entre el reinado de Felipe III y el Juan Carlos I, en 400 años en España no se ha producido ningún cambio a mejor, todo lo contrario.
Se ha abolido gracias a Napoleón Bonaparte la inquisición, y se han puesto tribunales e instituciones mucho más crueles, campos de detenciones para inmigrantes, video cámaras por todas partes, funcionarios en cada esquina, peores puestos de trabajo, hay más pobres, agricultura química...

Por todo ello sintiéndose acorralada parte de la población se planea un gran ataque similar al de las Alpujarras Granadinas o a las revueltas moriscas de la sierra de espadan.

Angelillo y Jesús labrando comentaban con gran ilusión por donde empezarían el contra ataque.
Ellos hacían sus cábalas en el mismo lugar donde diseño su magistral plan de guerra el Gran Cardau, el compañero camarada rey morisco.
La ofensiva de liberación debía ser inminente, España no aguantas mas.
Las autoridades que gobiernan el país se han propuesto en un plazo breve exterminar a la disidencia, igual que Felipe III hace 400 años.
Los rumores de que el gobierno y la corona van a sacrificar a gran parte de la población es un clamor que no se puede silenciar en el estado Español, se habla de 4 millones de expulsados a Alemania.
Las revueltas sociales serán inminentes y sangrientas.
Entretanto Angelillo y Jesús esperando la lucha de liberación que esta empezando con manifestaciones, fiestas y conciertos, pero estamos seguros de que acabaran con ocupaciones de las plazas publicas a lo egipcio, tunecino y libio, este par de militantes tienen orden de resistir hasta el último aliento de su vida en su huerta ecológica. Entre tanto los camaradas moriscos sefarditas concentran efectivos para hacer la revolución.
El mayor riesgo para la integridad personal de Angelillo y Jesús se produce cuando van por los caminos al campo.
Con la crisis los pasos están custodiado por la guardia civil.
El camino del valle de Uíxo a Nules no es gran distancia, unos 10 kilómetros, pero se encuentra repleto de miembros de las fuerzas de seguridad del estado español parando a los coches de los pobres.
Multan a conductores como Angelillo aduciendo alguna escusa seudo legal como no llevar pasada la itv, no tener asegurado el vehículo, no poseer puntos del carnet de conducir, ir con las luces fundidas, llevar las ruedas desgastadas, ir sin frenos, tirando humo, circular por encima de la velocidad establecida... o cualquier otra impertinente razón que se inventan los agentes con tal de acabar con la resistencia psicológica de las personas humildes, honradas y trabajadoras como Angelillo y Jesús.
Al igual que muchas buenas gentes de bien, este par de camaradas se ven obligados a salir del pueblo por intrincados caminos ocultándose como si fueran malhechores.
Se introducen entre senderos que discurren entre campos de naranjos sombríos, melancólicos, abandonados, cuyas ancestrales entrañas guardan terribles secretos de los pueblos milenarios que habitaron estos lugares. El camino esta lleno la ruinas de poblados ibéricos saqueados por los contemporáneos y las autoridades municipales.
Los cimientos de las viejas atalayas testimonian la grandeza de la civilización perdida. Las malas hierbas destruyen el patrimonio, los sapos croan en los barrizales de los cimientos ibéricos bajo una media luna roja.
Las serpientes entre las ruinas buscan su presa y vagan entre la mampostería derribada.
Los conquistadores de los íberos tampoco han corrido mejor suerte.
Las columnas romanas tiradas por los campos de Uíxo se amontonan como si fuera escombro.
Las tumbas romanas son expoliadas y los huesos esparcidos por la eras sirviendo de escondrijo a los escorpiones, las ratas y los gusanos.
Los habitantes de Uíxo saquean las tumbas romanas obligados por la crisis económica.
Los vecinos por las noches de luna llena salen con palas y sacos, con mucho sigilo, esquivando a la policía que con metralletas y pastores alemanes vigilan el pueblo.
Por los caminos los uxenses van en silencio entre los viejos algarrobos ahuecados cuya figura fantasmagórica dibuja un paisaje de terror mientras son seguidos por la mirada de las lechuzas. Llegan hasta las tumba romanas, allí cavan hasta encontrar la preciada calavera, en ella siempre se halla alguna moneda metida al difunto por un ser querido hace muchos siglos.
Según las costumbres romana con esta moneda pagaría el difunto a Caronte, el barquero del hades su pase al otro mundo.
Los uxenese según sus costumbres con la moneda pagan al tabernero.
Una vez expoliados y removidos los huesos del muerto se le da una patada al cráneo del conquistador romano pronunciando el nombre de los opresores actuales: los hermanos ventura, la alcaldesa, el director de la caja San Isidro ... y marchan contentos a gastar el botín.
Las jornadas de Angelillo y Jesús empiezan tras el turno de los expoliadores.
Cada mañana emprenden el camino andado por los narcotraficantes, los gitanos y los saqueadores de tumbas.
Angelillo y Jesús antes de salir otean el horizontes intentando descubrir las sirenas de los coches patrullas. Uno de ellos desde los alto de una colina con unos prismáticos y un traje de camuflaje, en posición de víbora divisa las rotondas donde el enemigo se posiciona deteniendo los vehículos de los pobres. El otro entre tanto prepara el vehículo introduciendo pimentón Carmelita en el radiador del coche para taponar las fugas, pega con espadrapo cables quemados, cambia bujías y espera el parte de la situación.
Una vez el camino queda libre se confirma con una llamada perdida de móvil dando arranque la maquinaria pesada del cincuencento. El vehículo avanza con marchas cortas atento su conductor a un posible giro, huida y ataque suicida contra la guardia civil.

En una de las jornadas de Angelillo y Jesús, tras atravesar las mil y una rotonda del casco urbano del pueblo, realizadas por los caciques locales y las autoridades municipales para blanquear el dinero proveniente del narcotrafico, las sanciones de trafico, la lotería de fabra, la prostitución, venta de armas, comercio de órganos, esclavitud de menores, y la venta de estampitas religiosas del papa Benedicto XXX sacando el diablo a unos herejes caníbales negros del congo que se habían comido a una monja.
Superadas cada una de las rotondas decoradas con costosos monumentos de Ripolles, que sirven no de decoración urbana, si no de escondrijo para la guardia civil, llegan entonces Angelillo y Jesús a los terribles caminos de contrabandistas que esquivan la autovía ocultos por los pasos de las montañas.
Son estas sendas estrechas, un coche cabe con dificultad, y fue por donde paso como el cid campeador Cardau, el rey morisco.
Hoy la senda de Cardau sirve para llegar al mediterráneo sin tocar la nacional 340, la autovía, ni nada donde pudiera encontrase la sombra verde, perversa, sádica y psicótica de un pistolero de la guardia civil con su bloc negro de multas marca hacendado y su boli bic.
Por este camino Angelillo y Jesús protegidos por el espíritu ancestral del rey Cardau van tranquilos y sintiéndose a salvo de los siervos del Rey Cristiano.

Breve historia de una jornada de trabajo.

En una de sus jornadas ocurrida no hace mucho, cuando estaban pasando cerca del poblado ibérico de Orlei, una inmensa niebla envolvió el vehículo. El motor empezó a dar tirones hasta apagarse. Angelillo le dio a la llave pero no arrancaba, salieron los dos y avanzaron por la niebla. Cuando llevaban mas de 300 metros andados vieron una hoguera en medio de las nubes. Al rededor de la hoguera danzaban dos mujeres idénticas, eran dos hermosas gemelas. Vestían como gitanas y tenían rasgos de esa exótica raza. Bailaban la danza del viente, llevaban unas preciosas diademas de oro y perlas en la cabeza, un pañuelo engarzado con oro del que pendían diminutos cascabeles. Alrededor de ellas, en un circulo gitanos bailaban y tocaban guitarra, daban palmas, cataban bulerias, y otros asaban un enorme cordero y a un guardia civil.
Una anciana sin dientes, enlutada, vestida con un dornajo raído, con la cara picada por la viruela , arrugas en la nariz se acerco a Angelillo:
Tengo que decirte una cosa- dijo - pasando una rama de hierba buena por su mano mientras le leía el destino escrito en las rallas de la palma.
Pero Angelillo por extrañas circunstancias que ni el mismo comprendía no atendía al adefesio diabólico de la anciana arrugada con la hierba buena, solo tenia ojos para las gitanas adolescentes que bamboleaban sexualmente su vientre al ritmo de la música.
Los gitanos les hicieron una señal para que se acercaran a ellas. Danzando y dando palmas fueron. Las dos muchachas eran idénticamente iguales, no se podía diferenciar una de la otra. Tenían 16 años, sus pechos eran firmes y abultados, se transparentaban a través de las delicadas sedas. Angelillo embriagado por el ritmo de la música, los roces de las muchachas que se ofrecían, empezó a besar a una y la otra.
Sus labios eran carnosos y sus ojos negros, brillaban desprendiendo una lujuria hechizante. La pasión de los ojos de las gitanas era superior al fuego que crepitaba y cuya llama ascendía más de 40 metros.
Las doncellas se enredaban entre los brazos de Jesús y Angelillo, se intercambiaban entre ellos con una sonrisa inocente y maléfica. Las dos gemelas cuando se desprendían de los brazos de sus amantes se unían entre ellas besándose pasionalmente mientras los gitanos tocaban guitarra.
La gitana anciana desapareció entre las brumas.
Poco a poco Angelillo y Jesús quedaron dormidos bajo un algarrobo.
La noche llego clara, los gitanos robaron la luna, se pobló el cielo de estrellas. Despertaron al anochecer cuando unos expoliadores les dieron una patada para ver si estaban vivos ya que pensaban que serian compañeros suyos abatidos por la guardia civil.
Angelillo y Jesús se levantaron y se fueron al coche.
Arranco sin problemas.
Se preguntaron uno al otro si recordaban lo que había pasado y se confirmaron mutuamente la aventura.
En el coche encontraron una carta, era de la gitana anciana.
Vamos a abrirla- le dijo Angelillo a Jesús.
No angelillo, es mejor que esperemos a llegar a casa, podría traernos mal fario.
No había terminado de decir estos cuando se escucho las sirenas de un coche patrulla.
Pararon para oír la cínica voz de un gordo con bigotes y cara de fascista.
A su lado había una silueta hermosa. Se trataba de una mujer guardia civil, aunque también tenia cara de fascista y neo nazi.
-Buenas noches caballero. ¿Dando un paseo? Venga documentación.
-Perdone agente Es que tenemos un poco de prisa, venimos de trabajar y estamos cansados. ¿Podría dejarnos pasar?
¿Esta de broma caballero? En España nadie trabaja. La documentación del vehículo de inmediato o te meto un paquete que vas a subir directo al cielo para encontrarte con el gran jefe. Menos guasa, que no me gusta vuestra pinta de perroflautas, documentación coño.
Esta bien, no hay problema agente, ahora le entrego la documentación- le respondió angelillo.
Angelillo sonriendo hizo como si fuera a recoger la documentación de la guantera, pero lo que hizo fue distraerlo para acelerar poniéndose delante del guardia civil y meter la marcha atrás atropellándolo. Su compañera se quedo con la boca abierta y catatónica, parecía de cartón piedra.
Angelillo la metió en el coche para que le sirviera de rehén, pero del empujo no debió calcular bien la distancia y la joven se dio con en el marco de la puerta abriéndose la cabeza. Quedo inconsciente del impacto con una enorme hemorragia. No pudiendo hacer nada por ella mas que darle un ultimo beso y tirarla en medio de la rotonda donde había varios perros abandonados.
El coche arranco.

Vamos compañero- exclamo angelillo a Jesús que estaba eufórico de la alegría.
Cojonudo- dijo Jesús, te los has cargado.
Lee la carta de la gitana- dijo angelillo a Jesús.

Carta de la gitana.

Hoy nos encontraremos tu yo Angelillo, las runas me dicen que no me atenderás a lo que tenga que decirte, por lo tanto te lo escribiré.
Si abres la carta antes de arrancar el coche evitaras el percance con la guardia civil. Si por el contrario no lees la carta antes de arrancar, enhorabuena, te habrás cargado a dos de esos que han sido tan duros con mi pueblo. Vivirás por haberles matado como un héroe y un proscrito como tus antepasados. He de decirte algo que desconoces, tu desciendes moriscos, concretamente del rey de Cardau. Vas a seguir sus pasos. Encabezaras la resistencia de los anti sistema. Primero tienes que unir la tribu perroflauta y hacer que no piensen en la fiesta, en la cerveza, en el yoga y en la meditación.
Harás como moisés un éxodo con tribu anarquista a la tierra prometida. Llegarás a un valle donde hay cooperativas auto gestionadas, eco aldeas, asambleas y granjas ecológicas. Vagaras por los montes de la sierra de espadan. Allí cavareis trincheras y pedirás auxilio al rey de marruecos, de Libia, Irán, Corea del norte, a Fidel castro y a el Emir de la Arabia feliz. Pide Angelillo que conquisten España y arrojen a la hoguera a todos los visigodos y romanos. Tu primera parada será para ocupar el despoblado morisco del jinquer. La policía no te encontrara en ese lugar.
En una enorme cueva cercana al castillo, el rey Cardau escondió un gran tesoro valorado en tres veces el PIB de España. Adoptaras una nueva identidad. Tendrás de sobra para financiarte, no necesitas ir a la banca ética, ni a los microcréditos. Cerca de la cueva del tesoro vive un aristócrata de la Arabia feliz. Porta larga barba blanca y turbante, es un inocente perseguido por las autoridades, responde al nombre de Bin Laden, tiene un gran ejercito, si le eres fiel y amigable te lo prestara.
Angelillo y Jesús decidieron seguir los consejos de la sabia gitana, pero antes volvieron sobre sus pasos para ver si encontraban a las gitanillas para llevarlas consigo.

Un texto de Ángel Blasco Giménez.
Angelillo de Uíxo para algarabía.
derechos safe creative. Basado en hechos reales.

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