domingo, 3 de julio de 2011

Episodios nacionales. Las reformas de Zapatero







Los episodios nacionales de angelillo de Uixó. Las reformas de Zapatero.

Madrid 1 Mayo del 2011.
Desde una ventana de la Moncloa se ven a lo lejos revueltas pacificas del colectivo de indignados. La nación española pasa de nuevo hambre, está contraída, errabunda y sin identidad.
Grupos de indignados compuesto por estudiantes de muchos estudios y con ideas simples se manifiestan en las plazas. Conversan, opinan y el pueblo los conoce por su cobardía manifiesta para llevar a cabo sus propuestas, más que los indignados se le podría llamar los asustados. Son tuteladas sus reivindicaciones por codiciosos abogados de origen sefardita.
Mandan los indignados desde las plazas con avioncitos de papel al presidente Zapatero las propuestas tuneras recogidas por el numeroso colectivo de licenciados.
Las calles han sido tomadas por batucadas de sindicalistas amorales que bailan de forma cómica riéndose de lo mal que esta la clase trabajadora.
Los sindicatos mayoritarios ocupan las principales avenidas, en callejones gateros se encuentran lo que queda de los anarquistas. Cuando se cruzan indignados, mayoritarios y los espectros anarquistas se saludan agitando las banderitas y alzando el dedo corazón con el puño cerrado. La cuchufleta es devuelta con bajada de pantalones exhibiendo culo velludo.
Los guardias civiles de a caballo vigilan a todos ellos. Tienen los civiles ganas de fusiles, los nacionales apostados junto las furgonetas van con escudos antidisturbios, porras, cascos, mascan chicle, impacientes aguardando los altercados. Se escuchan los sabios consejos de los veteranos acostumbrados a las manifestaciones tras la muerte del dictador Francisco Franco:
-Dar a la cabeza con las porras, a las embarazas, a los de pelo largo, y dar muy fuerte para que no se levante de nuevo.
El presidente de España se encuentra emburbujado en la moncloa.
Solitario tras la mesa de un gran despacho enmoquetado al estilo isabelino contempla distraído el cuadro que decora la habitación. Se trata del retrato en oleo de Felipe IV posando con los leotardos típicos de la época, gorro con plumas, camisa negra bordada y en la pechera la orden de calatrava. A los pies del presidente hay un brasero con el que se calienta.
Tienen tanto el retratado como el presidente Zapatero la mirada de pasmados.
El presidente absorto de sus compromisos se recrea en el cuadro que le inspira paz, ternura y confianza. La misma que suele predicar en sus mitines políticos, seguramente inspirado por la escuela de ese rey tan hispano semejante en personalidad y criterio a Jose Luis Rodrigez Zapatero: “el pasmado”
Tres Golpes en la puerta del ujier Rojoy llaman a la realidad al presidente.
Torpemente balbucea un entrecortado: Entren.
El ujier , un nuncio castrado de mediana edad, engalanado con frac y pajarita, con barbas apostólicas, gafas, corpulento y barrigudo haciendo una reverencia le anuncia:
-Señoría, los invitados aguardan que les de auditoria.
-Que pasen-dice regiamente Zapatero.
En el despacho contiguo aguardan empresarios, obispos, militares, agentes de bolsa, aristócratas. Todo allí es algarabía, aplausos, comentarios verdes y jocosos. La cuadrilla de conspiradores entre canapés de caviar y champan se encuentran envalentonados. Culpan al presidente del clima actual de disturbios y altercados.
Habla el obispo purpurino Rouco media ostia:
-Por la fuerza todo se arregla. Los disturbios y las manifestaciones son fruto del marxismo del presidente, con Franco no habría nadie en la calle, eso es lo que necesita el país, mano dura y más catolicismo.
Los oficiales de la benemérita asienten con la cabeza.
Los congregados en ese cuarto preparan un golpe de estado.
Entre los golpistas se encuentra Diaz de Ferrandt, presidente de la patronal Española, Emilo Motín, el obispo rouco media ostia, el conde de melinacheli, y supervisando el golpe de estado consejeros anglo judíos del FMI con su presidente Dominique Strau Kant a la cabeza. También hay militares que escuchan y aguardan con las armas las ordenes de banqueros, empresarios y obispos.
Emilio Motín realiza los últimos preparativos, hace un discurso con gesto convincente y dramático para exaltar el valor necesario ante el combate incierto.
-Nuestras empresas se encuentran en la ruina por culpa de pagar impuestos. Desde la muerte del gran Caudillo hemos hecho demasiadas concesiones al estado que lo gasta en dárselo a los holgazanes del país: parados, enfermos mentales y paralíticos a los que subvenciona la vida, viudas, ancianos, sanidad. Eso sale nuestras empresas que se encuentran arruinadas. Es hora de acabar con el despilfarro. Como sabéis zapatero me quiere como a un hermano, intentare convencerlo de que deje de comportarse como un maldito comunista y dirija al país como una empresa. Si se niega a firmar nuestras reformas, lo secuestramos ¿ Queda claro?
-¿Y matarlo? Dios debe juzgar su alma, pero su cuerpo nos pertenece- dice Roucco media ostia.
-Nada de matar aunque sea culpable de muchas cosas. ¿Vale roucco?- replica cabreado Motín.
Los golpistas asienten con la cabeza, el ujier que escucha los conduce imperturbable al despacho del pelele que sigue embobado.
Por el pasillo que conduce al despacho de zapatero se ultiman los detalles del golpe de estado.
El presidente de la patronal Diaz ferrandt se dirige a la horda con satisfacción frotándose las manos:
-Caballeros, con la reforma laboral que impondremos “al pasmado” aumentaremos en un 600 por cien los beneficios.
- ¿Y que pasará si la plebe se revuelve? - pregunta el conde de Melinaceli, un avinagrado aristócrata momificado, seco, senil, con largos colmillos y monóculo anacrónico sobre el ojo derecho, gusta de llevar sable y navaja - Mi padre me contó como fusilaron los malditos anarquistas al abuelo, y a él mismo en el 39 le hicieron trabajar como un campesino recogiendo patatas, sacando a pastar a los marranos y sufriendo todo tipo de trabajos miserables. Los pobres están llenos de furia criminal, no son como nosotros gente caritativa.
Por la plebe no os preocupéis- aseguro un consejero griego del FMI - los miserables solo piensa en matarse entre ellos, el fútbol, la religión y las mujeres. Al pueblo no le interesan esas cosas de política. Para cuando tenga consciencia de lo que está pasando estarán arruinados y en la miseria. Los pobres no tienen energía.
¿Y las manifestaciones de hoy?- pregunto el conde, hombre canijo, asustadizo, sanguinario, que vivía obsesionado con la idea de que los anarquistas de la CNT o grupos terroristas como el GRAPO o ETA le matarían.
-Las manifestaciones no las convocan los anarquistas, tiene que ver con algo del 1 de mayo. Es una celebración como la navidad, San Juan, el día del orgullo gay, la fiesta del loto... pero con flautas, perros, pancartas y consumo elevado de cerveza - contesto el presidente Diaz ferrantd-
Entre tanto, a pocos metros los asistentes al 1 de mayo que no habían ido a la celebración del festival pijo del viña rock recorrían monótonos las plazas, callejones, avenidas, canturreando el asereje y waka-waka de shakira.

El ujier entra discreto al despacho, Zapatero esta de rodillas bajo la mesa encendiendo el brasero apagado. Entra la comitiva seria y encuentran a Zapatero arrodillado soplando.
Buenos días excelencia, me alegro de que nos de auditoria tan pronto a mi y a mis humildes amigos- exclama Motín haciendo un ademan de pleitesía con cabeza inclinada.
El resto que saben que Motín a aprendido modales para hablar con presidentes, reyes y accionistas le imitan. Besan la mano y los labios de Zapatero en señal de lealtad.
El presidente responde con evidentes muestras de sincero cariño saludando a cada uno de los asistentes:
Motín, Díaz ferrantd, Conde de Melinacheli, Roucco... y comitiva. ¿En que puedo servirles?
Los golpistas, golfos de la alta sociedad, picaros sin vergüenza, conocedores de todos los vicios, hacen cumplidos al presidente. Este sonríe sintiéndose en grado sumo generoso por los halagos.
Zapatero toma asiento e invita a los asistentes a que se tumben junto a él en el sofá de la democracia.
Todos se repantigan. El presidente pone los pies encima de la mesa, hace pose de reflexivo, en la sala reina el silencio, para romperlo Zapatero les pregunta que desean concretamente de él.
Toma la palabra Motín:
-Señoría es mi triste deber comunicar que todas las empresas de España están en la ruina y por ello hemos venido a proponer una serie de reformas muy importante para salvar la economía.
Sabrá que hay una crisis económica por culpa de los norte americanos, ese estado fallido ha quebrado como en 1929 y ha contagiado su crisis a los Europeos periféricos.
-Algo me suena- responde el presidente sin comprender el meollo de la cuestión- pero nosotros no tenemos crisis, solo dificultades económicas, y eso es muy diferente. España es solvente como cuando Felipe IV.
Zapatero señala con su huesudo dedo al rey que con su cara de imbécil preside el centro de la pared del despacho presidencial. Zapatero le dirige al retrato una mirada cómplice que parece devolverle el subnormalito de Felipe IV.
-No señoría- dice el conde de Melinacheli- eso era ayer, hoy las agencias de calificación dicen que hemos quebrado. Revise las cuentas del estado Español, si quiere le dejo mi reloj calculadora casio para hacerlo. Nos encontramos como California, al punto de la quiebra, y por eso estamos aquí, no como empresarios ni gente interesada, si no como patriotas.
A coro los golfos repiten:
-Patriotas, patriotas.
Zapatero lentamente, como un perezoso, se levanta quejumbroso del sofá. Se despereza como un perro, suenan los huesos del presidente ranqueando con los lejanos lamentos del pueblo.
Se dirige a una gran mesa repleta de documentos, los aparta con cuidado dejando el centro despejado. Como la pila de papeles es muy superior a sus fuerzas pide ayuda de los felones que se encuentran mirando sin hacer nada. De mala gana colaboran amontonado los documentos secretos en los bordes de la mesa. Una vez hecho esto Jose Luis llama al ujier para que traiga el desayuno.
En la sala se ha producido nuevamente el silencio.
Criadas con cofia, seriedad en el rostro, precisión, se afanas a servir a los asistentes. El presidente de FMI Dominique S. Kant que esta de arbitro en el golpe de estado mira a las eróticas chachas de la moncloa con ojos de lujuria. Portan café, chocolate y churros.
Al presidente el mayordomo le coloca el babero presidencial para no mancharse.
Se mete en la boca un Zapatero lánguido, melancólico, ausente los churros.
Motín viendo que el pasmado no reacciona persuade:
Presidente, no debe entristecerse por mis palabras, puede consultarlo en la prestigiosa revista Wall street journal. El país se encuentra muy mal, el estado de bienestar es insostenible y nuestras humildes empresas están a punto de quebrar, pero inyectando dinero en bancos como el mio salvamos nuestras empresas, que es salvar a España.
¿De verdad Motín?- pregunta un poco más animado Zapatero.
Coño Jose luis, que nos conocemos hace años y nos hemos ayudado muchas veces. ¿No soy yo tu consejero fiel?
Si- responde pensativo Jose luis.
Confía un poco en los amigos. El poder te está transformando.¿ Por qué crees que estoy aquí ? si hasta Roucco ha venido a bendecir la reforma financiera-laboral.
¿ Puedo verla antes de firmar? - pregunta dubitativo Zapatero.
¿No estarás dudando de nuestra palabra bendecida por dios, los evangelistas y los apóstoles?- Pregunta indignado Roucco media ostia señalando con el dedo al pasmado.
Monseñor por Dios, no, soy cristiano viejo y leal- responde atribulado zapatero.
No me hables de tu cristianismo que estoy con estos señores por haber permitido el matrimonio de los gays y la asignatura de ciudadanía. Te debería excomulgar comunista.
Yo no soy comunista- contesta ofendido Zapatero- Me obligo Rubalcaba a hacer eso, fue contra mi voluntad, razones de estado y estadísticas me dijeron.
Diaz Ferrandt y Motín tranquilizan a monseñor Rouco que se encuentra apunto de estallar de ira revenida por la ley del aborto, eutanasia, investigación con células madres... y demás actos del pasmado contra la santa madre iglesia.
Monseñor se repantiga en una cátedra de terciopelo purpura jalonada con diamantes, de espaldas a Zapatero y hablando solo, quizás con Dios o el diablo, mira de reojo con furia al pasmado que le esquiva la mirada.

Banqueros, empresarios rechonchos, sonrosados, de mirada semítica agitan papeles y recriminan al pelele que firme las reformas ya.
El presidente se bambolea como un gusano partido por un azadón de un campesino. Intenta unir criterios, se frota con los dedos las aletas de la nariz.
-¿Y saldría muy caro el rescate a vuestras empresas?- pregunta Zapatero.
Bueno- dice por lo bajo Motín- es posible que se lleve por delante los fondos de los desempleados, alguna pensión, algo de sanidad, becas y otras menudencias, es un precio insignificante con lo que ganaremos después.
Zapatero que aun va por la mitad del primer churro lo deja sobre la taza y camina pausadamente por el despacho siendo rodeado en un circulo formado por el cuerpo de todos los congregados. Es el centro de todos ellos, se sabe protagonista y debido a su personalidad fetichista es feliz por ser el objeto deseado.
Realiza unos esfuerzos cognitivos supremos, cuando está a punto de llegar a una conclusión recuerda los churros y pierde el hilo de su pensamiento. Recorre la vista por el salón paseando la mirada por encima de los hombros de los golpistas que le rodean. Observa el chocolate en la mesa. Tazas porcelánicas de manieses ricamente labradas aun humean, la respuesta fisiológica al estimulo es la caída de baba del presidente. Con esfuerzos rompe el circulo a travesando el cordón de empresarios que le zafan y se dirige hacia la mesa, los demás le siguen. El presidente toma nuevamente su churro bien sucado en el chocolate. Por cortesía aunque no de corazón ofrece la bandeja de plata al resto, rápidamente se da cuenta de su error.
Los glotones de los banqueros se lanzan ávidos al abordaje desplazando al presidente.
Entre tanto el presidente ojea los documentos de los reformistas:
Punto 1º ayudar con todo el presupuesto nacional a la banca.
Punto 2º abaratar el despido.
Punto 3º alargar las jubilaciones.
Punto 4º eliminar las ayudas sociales.
Punto5º eliminar la sanidad publica.
Punto 6º...
Zapatero llama a su amigo Motín que participa del saqueo de los churros. Roucco esta a punto de estallar de ira nuevamente por que le dejan los más pequeños y aceitosos. Saca el crucifijo y habla del redentor y los pobres, amenaza con la excomunión si no le dan los churros más grandes y sabrosos. Motín con pesar deja los churros para hablar con el pasmado.
El presidente del FMI al ser francés se abstiene de probar alimentos Españoles alegando que tienen ecoli, la bacteria asesina, pidiendo disculpas se dirige como buen francés donde se encuentra las chachas. Dominique agarra a una sirvienta y la fuerza, Roucco bendice la unión haciendo la señal de la cruz en el aire con un churro.

Zapatero que se encuentra en un rincón con Motín susurrándole para que no les escuchen el resto le dice con timidez:
Todo esto no estaba en mi programa electoral, si mando hacer estas barbaridades el pueblo me corta los huevos y me manda colgar boca abajo como a Mussulini.
Jose Luis- le responde poniéndose chulo Motín un poco desconcertado de que Zapatero se diera cuenta de la jugada, da al pasmado un golpe en la solapa de la americana con la mano abierta, abre asustado los ojos el presidente arqueando sus ballesteras cejas - Tu no conoces al pueblo ni a los trabajadores, es cierto que millones de ellos sufrirán , pero acaso
¿ no lo hacen ya? Todos estos puntos es para hacer un país más fuerte, un nuevo estado lleno solo de ricos, gente respetable no como esa chusma obrera.
Pero...- balbucea el pelele.
Calla por favor- le ordena Botín- desde hace siglos se ha buscado el bien común para las personas y hoy podemos hacer justamente eso, el estado del bienestar ha fallado. Nosotros dirigiremos el país como una empresa, fundaremos un nuevo estado.
¿cual? Pregunto interesado zapatero.
El estado de plaza sol, un país para ricos, donde los afortunados puedan gozar de sus privilegios.
¿Y que pasará con el pueblo?- Pregunto intrigado zapatero.
El pueblo besara como siempre sus cadenas, nos dará la razón y más cuando les hablemos del estado sol ¿ a quien no le gusta el sol? ¿A ti te gusta el sol Jose?
No se Motín- responde zapatero desconcertado- yo soy muy blanco, me salen sarpullidos cuando me da.
Sarpullidos, sarpullidos, pareces tonto zapatero- le recrimina Motín.
Hombre, no me digas eso- se queja jose Luis.
Volvamos a lo que te preocupa - comenta Motín- A la plebe les convertiremos en ciudadanos de nuestro estado sol. En el podrán vivir libres si se esfuerzan y trabajan, incluso podrán llegar a ser ciudadanos de primera como nosotros convirtiéndose en empresarios. La actividad empresarial no tendrán que pagar impuesto. España sin impuestos, con libertad absoluta empresarial será el lugar más rico y lleno de oportunidades que exista bajo el astro luminoso. ¿Que te parece?
¿Y yo puedo ser presidente del estado sol?- pregunta suplicante el felón de zapatero.
De por vida Zapatero, y sin elecciones cada 4 años, pero para eso debes firmar las reformas.
¿ Y esto no lo deben ver en el parlamento, o la gente lo debe votar?- pregunta rascándose la cabeza Jose luis.
No Zapatero, ademas ¿ no escuchas las manifestaciones de los chicos de la plaza sol? El pueblo habla y quiere el estado sol- le responde el conde de melinachele nervioso de tanta conservación, saca la aristocrática navaja y a ella pone a zapatero en el cuello- el parlamento lo tienes aquí.
Rouco con las bragas de la asistenta en la cabeza bendice al conde haciendo la señal de la cruz con el plumero de la chacha que intenta escapar de Dominique.
¿Que significa esto Motín?- pregunta sobresaltado el presidente.
Motin, Diaz ferrand y todos los asistentes al grito: golpe de estado y reformas, intimidan al presidente.
Jose Luis firma con una navaja en la garganta y Motín susurrándole al oído le dice pausadamente:
-Mucho cuidadito Jose luis en irte de la lengua y contar lo que aquí ha pasado. Dirás al conjunto de la nación que los norte americanos, los chinos y los alemanes te han obligado a firmar, ¿te enteras? De los contrario volveremos.
Se va comitiva, antes de salir Roucco media ostia se gira sonriendo y le hace la señal de la cruz a Zapatero.

2 de mayo del 2011 boletín del estado anunciando la creación de una gran reforma nacional y un nuevo sistema económico donde se entrega el estado a los ricos.
Los empresarios empiezan a vengarse de los trabajadores especialmente de los afiliados a los sindicatos, se producen miles de despidos, desalojo de viviendas.
La calle se llena de gente desconcertada sin empleo y con deudas. Zapatero el pasmado es felicitado por los mercados internacionales, le comparan con Carlos V .
El presidente desde wall street con humildad ante tanto halago internacional se sonroja, exclamado con fingida modestia ante la prensa exclama:
Si con que me comparéis con Felipe IV yo me conformo.
Como las reformas zapatero recibe muchas felicitaciones internacionales el presidente perdona a los golpistas y los condecora con la orden al mérito.

Angelillo de Uixó para los episodios nacionales. Capitulo dedicado al golpe de estado dado al pasmado de Zapatero.

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